Mi
mente es un lugar desconocido. Extraño. Sin duda debe estar dividido en
dos partes. Ninguna de las dos permanece nunca en silencio. Es un lugar
abstracto. Lejano. Creo que tiene un lado rebelde que no se atreve a
salir. Intuye demasiadas cosas. A veces es inoportuna. Mi mente, aún
así, esta ordenada, el problema es el orden que ella misma ha creado. Le
da demasiada importancia a cosas que en realidad no la tienen (al
menos, para el resto del mundo.), y deja en un segundo plano cosas de
que deberían serme de gran importancia. Mi mente ha aprendido que no
tiene razón, pues el resto de los mortales así lo creen. Pero aún así,
es valiente. Libre. Luchadora. Tiene las ideas demasiado claras, aunque a
veces, se escondan detrás de una fina capa de dudas. Tiende a expulsar
todas las ideas en forma de palabras, pero a veces no le sale tan bien
como espera. Creo que hay un problema de conexión. Mi
mente es un lugar lleno. Demasiado quizás, pero nunca sabe ver cuando
las cosas sobran. Y tampoco ha sabido encontrarle problemas. Mi
mente es un lugar a veces olvidado. Tiene etapas en las que se
convierte en mi peor enemigo, pero yo sé que en el fondo, lo único que
siempre intenta es ayudar. Ya
he dicho antes que mi mente esta dividida en dos, pero me contradigo
diciendo, que está en constante evolución, lo que me hace ir pasando por
etapas. Positiva-negativa. Bondadosa-Cruel. Comprensiva-Intolerante.
Muchas veces he pensado que lo soy todo al mismo tiempo. No he visto
escrito en ningún lado que el hecho de que esos adjetivos sean antónimos
los haga incompatibles. Claro que tampoco he leído muchas cosas. Pero
si está escrito, ¿Quien dice que no se hayan equivocado? Al fin y al
cabo los humanos lo hacemos constantemente y de momento, somos los
únicos que podemos escribir. Mi
mente es espaciosamente un lugar pequeño y sin embargo, mis propias
ideas llegan a perderse. Suena extraño teniendo en cuenta que son las
que mejor lo conocen. El camino de vuelta resulta a veces largo. Otras,
no tanto. Pero siempre, siempre es complicado. Complicado para las que
deciden volver, porque hay algunas que nunca regresan. A veces me
pregunto que habrá mas allá para que decidan quedarse, otras me imagino
que simplemente mueren y esto último ha llegado a aterrarme y alterarme
el sueño. Quizás
mis ideas sean muy pequeñas, o quizás mi mente demasiado grande. Mis
ideas podrían ser muy grandes en otro sitio, en una pecera pequeña. Pero
en el océano, muchas veces se ahogan. Y lo peor es que lo hacen en su
propio mar. He llegado incluso a imaginármelo como un lugar oscuro y
lleno de atajos y laberintos, pues sino, me es difícil comprenderlo. El
único problema de mi mente que permanece (de los cientos que he ido
encontrado), se encuentra en la forma de cambiarla. No porque sea muy
complicada, sino, porque nunca la he encontrado. No me aterra el hecho
de no saberla, lo que me aterra y a la vez agrada, más bien, es el hecho
de no necesitar saberlo.
SMMC
PD ( Cartesdefum@hotmail.com) / (verduritavedruna@hotmail.com) ♥
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